Los conciertos que Sôber tenían programado ofrecer este pasado fin de semana en las ciudades venezolanas de Caracas y Valencia han tenido que ser suspendidos, al denegársele a la banda la posibilidad de entrar al país a pesar de tener toda la documentación en regla, informa la promotora Last Tour International.
El comunicado de los promotores locales explica que «después de casi 24 horas de luchar y agotar todos los recursos para que los dejaran entrar» a Venezuela, al final tuvieron que desistir al no prosperar las gestiones con las autoridades.
«Es una triste realidad la que vivimos en la actualidad las productoras pequeñas y medianas. No pudimos en ningún momento verlos, solo a través de los teléfonos móviles nos mantuvimos comunicados, ellos constantemente nos enviaron fotos y mantuvieron una actitud admirable, a pesar que fueron tratados como delincuentes, con un policía custodiándolos, sin poder dormir o acceder a su equipaje», destacan.