Paul McCartney estuvo el miércoles en Minneapolis y, como no podía ser de otra manera, le dedicó el show al recientemente fallecido Prince. “Prince, Minneapolis; Minneapolis, Prince. Van juntos”, haciendo referencia al lugar de origen del músico funk.
McCartney versionó “Let’s Go Crazy“, uno de los clásicos incluidos en Purple Rain. El escenario se tiñó de morado y el Love Symbol acompañó desde atrás. Podés ver el video de la presentación a continuación: