Un cáncer de próstata se llevó ayer a Yusef Lateef, uno de los pocos precursores del jazz que quedaban en vida y un maestro de los instrumentos de viento. En su carrera destacó su perfil multiinstrumentista, que le condujo a dominar la flauta, el oboe y el saxofón tenor.
En sus primeros años, colaboró junto a leyendas como Canonball Adderley, Charles Mingus o Archie Shepp. Buena parte de su discografía se repartió principalmente entre los sellos Prestige, Atlantic e Impulse!, sintetizando géneros como el world music y el bebop, entregando más de una veintena de discos muy recomendables entre los que destacan «Before dawn» (57) o «Contemplation» (60) «Eastern sounds» (61) y el enorme «Psychicemotus», publicado por Impulse! en 1965. En 1987 ganó un Grammy por «little symphony».