El pasado fin de semana Thom Yorke y Nigel Godrich anunciaron la retirada de sus álbumes de la plataforma Spotify por considerarla un modelo de negocio que sólo favorece a los inversores y artistas consolidados. “A los nuevos artistas se les paga una mierda con este modelo, es una ecuación que simplemente no funciona”, comentó Godrich.
Spotify ha querido defenderse en esta batalla musical y ha publicado recientemente un comunicado en respuesta a los músicos. “El objetivo de Spotify es crecer con un servicio que a la gente le encanta y que servirá de apoyo financiero a la industria a la hora de invertir en nuevos talentos y proyectos. Queremos ayudar a los artistas a conectarse con sus fans, encontrar un público nuevo. Gran parte de nuestro dinero se invierte en el fomento de estos”, explica parte del comunicado de la plataforma.