El Círculo de Bellas Artes de Madrid ha acogido este miércoles la presentación en sociedad del súper-grupo de rumba rock La Pandilla Voladora, integrado por los ‘estrafalarios superhéroes’ Muchachito Bombo Infierno, Albert Pla, El Lichis, Tomasito y el El Canijo de Jerez, acompañados por los músicos Diego Cortés, David Saénz de Buruaga y Tino di Geraldo.
«Somos cinco invididuos que estamos intentando salir del deporte, aunque a veces hacemos abdominales y footing», ha bromeado El Canijo en rueda de prensa, antes de que terciara Tomasito subiendo el nivel de desenfreno, poniéndose serio al asegurar que «del deporte se sale poniéndose uno como Tony Curtis, hasta las trancas».
El proyecto, que nació por sincera amistad y puro compañerismo, adoptó cierta forma durante unos días de ensayos en una massia gerundense, y por ahora se basa en un repertorio de «grandes éxitos y fracasos» de todos los participantes, como ‘La lista de la compra’ o ‘Felicidad’ de La Cabra Mecánica (es decir, de Lichis) o ‘Primavera Trompetera’ de Los Delinqüentes (esto es, de El Canijo).
Ejerciendo de alguna manera de dicharachero portavoz, ha sido el propio Canijo quien ha asegurado que el repertorio de este y los próximos conciertos será «muy arribita y muy alegre», al tiempo que ha avanzado que «seguramente» sigan adelante con la intención de hacer un disco conjunto, si bien ha puntualizado que eso «será en un futuro».
Por su parte, Muchachito, quien ha reiterado con vehemencia en no pocas ocasiones que «del deporte se sale», ha bromeado al asegurar que los ensayos en Girona fueron «muy problemáticos» porque Albert Pla no callaba, «con una gran retórica pero sin analizar el problema en sí».
Las responsabilidades en la pandilla se distribuyen con Lichis (bajo y voz), Canijo de Jerez (guitarra española y voz), Tomasito (tabla flamenca y voz), Albert Pla (guitarras española y eléctrica y voz), Muchachito (guitarras española y eléctrica y voz), Diego Cortés (guitarra española y coros), Tino di Geraldo (batería y coros) y David Sáenz de Buruaga (guitarra española, sintetizadores y coros).
La primera parada de su gira, llamada genéricamente ‘Del deporte también se sale’, tiene lugar este miércoles en la azotea del Círculo de Bellas Artes, con una apuesta clara por la fiesta desenfadada sin muchas más pretensiones. «No reivindicamos nada, la rumba sigue más viva que nunca así que tratamos de pasarlo bien, disfrutar como compadres con mucho feeling musical», ha resaltado El Canijo.
Tras la cita del Círculo de Bellas Artes, La Pandilla Voladora se dedicará a ensayar y a perfeccionar sus disfraces de superhéroes, para arrancar la gira propiamente dicha el 10 de julio en La Riviera madrileña. Ese mismo mes pasarán después por Barcelona (día 12 en el Poble Espanyol), Cartagena (Mar de Músicas, el 20), el Festival Pirineo Sur el día 26 y Torrent (Valencia, el 27 de julio).