Más de 54.000 personas asistieron este sábado a la segunda jornada del Sonisphere Festival, que este fin de semana se ha celebrado en el Auditorio John Lennon de Getafe (Madrid), con Metallica como estrellas indiscutibles. La banda estadounidense salió a escena pasadas las diez de la noche y ofreció una potente actuación de más de dos horas en un concierto especial en el que, tal y como habían adelantado, tocaron íntegras todas las canciones de su Black Album de 1991, el disco más exitoso de su dilatada trayectoria. Hit the lights, Master of puppets, The shortest straw, For whom the bell tolls y Fight fire with fire fueron las primeras canciones de un recital de puro heavy metal en el que la banda demostró que están viviendo algún tipo de segunda juventud. Y a pesar de ser su cuarto concierto en Madrid desde 2008, sus incondicionales siguen siempre respondiendo.
Incondicionales encantados de poder escuchar en directo, entero pero en orden inverso, el Black Album con clásicos del rock como Nothing else matters, Wherever I may roam, The unforgiven, Sad but true o el celebérrimo Enter sandman, coreado con fiereza por los una concurrencia perfectamente uniformada con las camisetas de la banda, mayoritariamente negras. En el tramo final sonaron Creeping death, One y Seek and Destroy en un derroche lumínico y de fuego que de veras calentaba a quienes estaban en las primeras filas. Una vez finalizado el recital, James Hetfield, Lars Ulrich, Kirk Hammett y Robert Trujillo pasaron un buen puñado de minutos, como siempre hacen, saludando a los fans, repartiendo púas e intercambiando saludos. El resto de esta jornada del festival lo completaron las actuaciones deEvanescence, Slayer, Mastodon, Sister, Within Temptation, Fear Factory, Vita Imana, Children of Bodom, Ghost, Enter Shikari, Gojira y Clutch. El primer día del festival la asistencia fue menor, con un total de 38.300 personas, según datos de la organización, con las actuaciones de otras bandas como Soundgarden, The Offspring, Limp Bizkit oMachine Head. En total han sido, por tanto, 92.450 personas las que han asistido al festival, superando así el record marcado la pasada edición (70.540 personas).