El pasado domingo 6 de octubre el mítico baterista Ginger Baker murió de manera pacífica a los 80 años. Esto lo hizo saber su hija Nettie a través de un comunicado. El legado de Baker no quedará en el olvido, pues con baqueta en mano y percusiones marcó el rock.
A los 16 años comenzó esta historia, cuando por primera vez decidió tomar unas baquetas, se convirtió en un referente de la escena subterránea del jazz. Y fue gracias a la destreza con el doble bombo que lo llevó a formar parte de Alexis Korner’s Blues Incorporated y suplir a Charlie Watts. Pero fue gracias al reconocimiento de la Graham Bond Organisation por la cual conocería Jack Bruce y trabajara con él más adelante.
En 1966 forma junto a Eric Clapton y Jack la banda Cream, centrándose en el blues, psicodelia y hard rock. En pocos años lograron reconocidas producciones: Fresh Cream (1966), Disraeli Gears (1967) Wheels of Fire(1968) y Goodbye (1969). Tras su separación se unió al supergrupo Blind Faith.
Pero la década de los 70 traía consigo un nuevo proyecto Ginger Baker’s Air Force, lanzando dos álbumes.
En 1980 se une a la banda Hawkwind, después de haber tocado como músico de sesión para el álbum Levitation. Sin embargo, abandonó a la banda.
A finales de los 80 se muda a Los Ángeles para emprender su carrera como actor. Por lo que lo podemos encontrar en la serie Nasty Boys de 1990.
En 1992 participó en el álbum Sunrise on the Sufferbus de Masters of Reality. Y en 1994 forma The Ginger Baker Trío con Charlie Haden y Bill Frisell. Además de unirse a BBM (Bruce-Baker-Moore) un power trío.
En 2005 se reunió con Cream para tocar en el Royal Albert Hall y el Madison Square Garden. En 2009 publica su autobiografía Hellraiser. Finalmente, en 2015 reforma Ginger Baker’s Air Force para algunas presentaciones en las que Baker ya se encontraba un poco enfermo.