Una de las integrantes del grupo punk ruso Pussy Riot, Nadezhda Tolokonnikova, condenada a dos años de cárcel por participar en un acto satírico contra el presidente Vladimir Putin en la catedral ortodoxa de Moscú, ha reanudado este viernes la huelga de hambre en protesta por la decisión de las autoridades de trasladarla a su celda desde el hospital de la colonia penitenciaria.
«Tolokonnikova ha declarado este viernes que rechazaba los alimentos», ha informado un portavoz del servicio de prisiones de Rusia, citado por la agencia estatal de noticias RIA Novosti. Según su marido, Pyotr Verzilov, la decisión de las autoridades de devolverla a su celda supone una violación de los compromisos a que habían llegado con ella.
Tolokonnikova había sido ingresada en el hospital de la Colonia Correccional Número 14 de la región de Monrovia, al sureste de Moscú, después de nueve días de huelga de hambre en protesta por las malas condiciones carcelarias y por el «trabajo esclavo» a que, según sus palabras, era sometida en prisión.
Otra de las integrantes de Pussy Riot encarceladas, Maria Alyojina, ha retirado este viernes su demanda de libertad anticipada en solidaridad con su compañera. «No tengo ninguna autoridad moral para participar en esta vista cuando mi amiga y compañera convicta Nadezhda Tolokonnikova no tiene esta misma oportunidad», ha declarado Alyojina ante el tribunal de la ciudad rusa de Nizhny Novgorod.
Alyojina y Tolokonnikova cumplen una pena de dos años de prisión desde agosto de 2012 en represalia por un acto satírico efectuado en febrero de ese mismo año contra el entonces primer ministro y actual presidente Vladimir Putin en la catedral ortodoxa de Moscú. Ambas deberían recuperar su libertad en marzo de 2014